Caja de herramientas: la perfecta organizadora de tus tardes de bricolaje
Orden, limpieza y mucha fuerza de voluntad. Estas son las tres claves fundamentales del buen manitas doméstico, que aprovecha cada uno de sus ratos libres para reparar o mejorar alguna de las partes de su casa. Desde pinturas mal encuadradas en la pared hasta mesas que cojean, existen un sinfín de circunstancias que pueden requerir de la destreza de estos clientes asiduos a las tiendas de ferretería.
Sin importar el grado de experiencia o la profesionalidad de estos pequeños amantes de los suministros industriales, lo esencial para poder desarrollar con éxito cualquiera de sus tareas es contar con un espacio adecuado para guardar y clasificar las piezas a utilizar, tales como los tornillos, las tuercas, los martillos o las pequeñas sierras. Una forma ideal de mantener el orden y facilitar la búsqueda de esta clase de elementos es el uso de las cajas de herramientas, que gracias a sus ventajas y a su naturaleza organizativa permiten llevar siempre encima todo lo indispensable para iniciar la reparación.
Maletín o bolsa, ¿qué caja de herramientas necesitas?
En la actualidad, existen un sinfín de modelos que permiten clasificar en el interior de sus departamentos todas aquellas piezas imprescindibles para nuestras tareas de bricolaje diarias. La elección de una u otra caja de herramientas dependerá del material que queramos introducir, así como de los tipos de arreglos que estemos acostumbrados a realizar. Dicho de otro modo, puede que una bolsa de tapa plana y de base reforzada de plástico, disponible en cualquier tienda de ferretería, sea la opción más adecuada para almacenar instrumentos ligeros como los guantes, las tijeras, alguna pequeña taladradora y un par de brocas. No obstante, si necesitamos almacenar piezas más pesadas y numerosas como los tornillos, las tuercas, los tornavises y los martillos, puede que un maletín con asa metálica y muchos compartimentos resulte más cómodo y práctico a la hora de transportar.
Una caja de herramientas homemade, el sueño de cualquier manitas
La ventaja de ser un experto en el manejo y el uso de este tipo de suministros industriales es que, pasados los años, uno puede dar el paso definitivo y construir su propia caja de herramientas, afianzando así tantas horas de dedicación al bricolaje. Utilizando un material como la madera, nuestro propio organizador puede resultar mucho más cómodo, ligero y manejable, sin olvidar colocar en el interior del mismo diferentes departamentos en los que poder guardar las piezas más pequeñas. Para darle un toque más personal y original a nuestra caja de herramientas, podemos incorporar en los laterales varios cinturones de cuero, que utilizaremos para colgar y sujetar herramientas de uso habitual como los destornilladores.
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